Ver ubicación del palacio de la Mosquera
El Palacio de la Mosquera es el palacio neoclásico más importante de la Provincia de Ávila. Está ubicado a 525 metros de altitud en la parte más alta de Arenas de San Pedro y rodeado de un terreno de 23.702 m2, que en su día estuvo ocupado por jardines de ornamentación a la francesa, huertas, pajarera, etc.
Es el edificio más emblemático de toda la comarca del Valle del Tiétar al sur de la Sierra de Gredos (a una hora y media de distancia de Madrid). Con una superficie construida de 5.656 m2, es propiedad del Ayuntamiento de Arenas de San Pedro.
El edificio consta de tres plantas:
En la planta baja de 2.041 m2 destaca el zaguán, del cual parten las salas que en tiempos de su primer dueño, el Infante Don Luis de Borbón y Farnesio, fueron los gabinetes de pintura e historia natural, biblioteca y sala de tapices.
Del zaguán parte la escalera imperial, que se ramifica en dos tramos para ascender a la primera planta, la planta noble de 1.798 m2, con techos de siete metros de altura, donde se encontraban los espacios privados de la familia del Infante y la capilla del palacio.
La segunda planta de 1.673 m2 de techos más bajos que la planta noble estaba dividida en apartamentos y se reservó principalmente al personal que servía en el palacio. Encima de esta planta hay dos torreones de unos 144 m2.
Algunas calles de Arenas de San Pedro se adhieren a las tapias del recinto como si quisieran englobar al palacio dentro del entramado urbano, pero sin quitarle protagonismo.
Sus fachadas orientadas a los cuatro puntos cardinales se abren al magnífico paisaje de la sierra de Gredos.
La historia del Palacio de la Mosquera
y las colecciones del Infante Don Luis
Hijo menor de Felipe V e Isabel de Farnesio, Don Luis Antonio Jaime de Borbón y Farnesio (1727–1785) fue orientado con tan sólo ocho años hacia la carrera eclesiástica a la cual renunció en 1754 por falta de vocación. Su boda morganática con la joven aragonesa, María Teresa Vallabriga y Rozas (1759–1820) le obligó a vivir lejos de la Corte a partir de 1776. Este destierro no le impidió desempeñar su papel de Infante convirtiéndose en uno de los más importantes mecenas del reino después de los reyes de España.
Deseoso de crearse un museo ideal basado en una visión enciclopédica del mundo, Don Luis reunió a partir de 1740 importan¬tes colecciones artísticas (909 pinturas, 4.215 estampas, 343 escul¬turas y 155 dibujos), una imponente biblioteca (más de 3.000 libros raros y preciosos), un magnífico monetario y uno de los más bellos gabinetes de Historia Natural de España.
Estas colecciones destacaban por su riqueza, gran variedad, originalidad e innovación, al encontrarse obras de los Brueghels, Tiziano, Rafael, Miguel Ángel, Veronés, El Greco, Velázquez, Ribera, Mengs, Bayeu, Watteau, Gérard Audran o Giovanni Volpato, conservadas hoy en colecciones privadas y en grandes museos europeos y americanos (Louvre, Prado, Uffizi, National Gallery de Londres y de Washington…).
Al abrir sus colecciones a artistas españoles como Goya o Luis Paret y Alcázar llamado «el Watteau español», Don Luis no sólo les permitió descubrir las nuevas tendencias estéticas que se imponían en Europa sino que también propició que estas influencias fueran asimiladas por los artistas españoles.
Los impulsos innovadores para el arte español desde el Palacio de la Mosquera son el tema de cursos de verano que se celebran desde 2009 en el edificio mismo.
En otro adjunto encontrará los programas de los cursos de 2009 y 2010.
El Palacio de la Mosquera en Arenas de San Pedro, ideado por uno de los más importantes arquitectos del neoclásico español de la época, Ventura Rodríguez, es un singular ejemplo de este estilo en España, con sus jardines plantados de parterres de broderie alrededor de la fuente mitológica de los delfines.
El palacio es una obra inconclusa, la prematura muerte del Infante no permitió su terminación. El ala derecha de este palacio con su pórtico monumental de inspiración romana, de líneas muy sobrias, fue decorada en estilo neoclásico inglés y amueblada con muebles de inspiración francesa en estilo Transición. Las pinturas murales realizadas por artistas anónimos estaban directamente sacadas de las escenas antiguas de Angelika Kauffmann y de los decorados de Robert Adam para las galerías de Luton Hoo, Syon y Newby. Había muebles diseñados por Ventura Rodríguez donde se podían apreciar influencias de la antigüedad y etruscas o detalles egipcios, mientras que otros fueron importados de Inglaterra. Este conjunto decorativo, muy innovador para la época, se correspondía perfectamente con los gustos personales del Infante, muy adelantado a su tiempo, no sólo en materia de ornamentación sino también por sus conocimientos en zoología, mineralogía o botánica.
A pesar de no estar concluido, este palacio es uno de los pocos ejemplos conocidos de residencias privadas del siglo XVIII que podía rivalizar con Sitios Reales como La Granja o Riofrío tanto por su arquitectura como por su decoración.
El ilustrado Infante vivió por y para el arte. Se rodeó de artistas relevantes y revolucionarios dentro de su oficio como Goya y Boccherini, quien formó parte de la pequeña corte del Infante durante más de siete años. A través de la huella que dejaron los muchos artistas y pensadores en el palacio, con su extensa colección de arte y su Gabinete de Historia Natural Don Luis hizo posible que Arenas se encontrara en la vanguardia de su tiempo.
El Palacio de la Mosquera en la actualidad
Para acercar la historia y el significado del Palacio de la Mosquera a un público amplio, el Ayuntamiento de Arenas ha editado en 2009 un libro sobre el mismo. Su autora es Dña. Sophie Domínguez-Fuentes, experta en la materia y doctora de la Sorbona con una tesis doctoral sobre las colecciones artísticas y la historia de este palacio. La doctora Dominguez-Fuentes dirige también los cursos de historia del arte que se celebran en el palacio.
En el edificio y su entorno se han realizado importantes inversiones a lo largo de los últimos años, encaminadas a su puesta en valor y a la recuperación del monumento. Existe un Plan Rector para el palacio y los jardines (arquitecto: D. Fernando Espinosa de los Monteros; paisajistas: Dña. Carmen Añón y Dña. Mónica Luengo). Actualmente se está trabajando en la cuarta fase de su rehabilitación.
En 2009 se ha logrado reconstruir la terraza de Ventura Rodríguez, se instaló electricidad en la planta principal y se eliminaron todos los tabiques y falsos techos en el edificio. Había sufrido estas intervenciones cuando fue utilizado como seminario y colegio (1943–1982). Desde finales de 2009 se pueden apreciar el trazado y los volúmenes originales.
En 2010 se van a recuperar dos terrazas de frutales de los jardines y se va a pavimentar con granito la terraza de Ventura Rodríguez, para que el público pueda disfrutar este verano de algunos conciertos de música clásica en el jardín.
A pesar de ello en la actualidad sólo una pequeña parte de este maravilloso inmueble está restaurada. El Ayuntamiento de Arenas, no puede él solo hacer frente a la enorme tarea de su restauración. Por este motivo se está buscando el apoyo de instituciones privadas, provinciales, autonómicas y estatales, no descartando la posibilidad de acudir también a organismos internacionales, como la UNESCO o el World Monuments Fund, para conseguir fondos que nos permitan recuperar el edificio y sus jardines en su totalidad para el disfrute de la ciudadanía, de instituciones e universidades.
En marzo de 2009 se ha creado la Asociación de Amigos del Palacio de la Mosquera, a través de la cual los ciudadanos y ciuda¬danas podrán apoyar la rehabilitación del palacio y su recuperación como un importante activo social, cultural y económico para la comarca.
amigospalaciomosquera@gmail.com
A su vez, el Ayuntamiento está constituyendo una Fundación con un Patronato para que vele y trabaje por la consecución de estos objetivos y que no dependa de la coyuntura política de cada momento. De este modo será posible garantizar la continuidad del proyecto de restauración y el desarrollo de un proyecto sostenible para su futuro.
En abril de 2008, por acuerdo unánime del Pleno del Ayuntamiento, se solicitó a la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Castilla y León la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de este singular monumento de interés histórico y artístico, muy vinculado a la historia de España y en particular al periodo de la Ilustración.
El futuro uso del palacio tiene que respetar su pasado histórico, artístico y monumental combinándolo con las demandas de los ciudadanos del siglo XXI. Serán precisos debates públicos y de expertos para definir su destino. Pero de ninguna manera, el Palacio de la Mosquera debe caer de nuevo en el olvido.
Con este fin estamos organizando desde el año 2008 numerosas actividades culturales y educativas en las partes rehabilitadas y no-rehabilitadas del palacio, que han tenido una acogida entusiasta. La finalidad de todas estas actividades ha sido llamar la atención sobre el edificio y la importancia de su historia respetando siempre el espíritu de su primer dueño, el ilustrado Infante D. Luís de Borbón.
